Grata impresión dejó en aficionados y profesionales Antonio Suarez. Foto: Comana
por: Víctor Ramírez “Vitico”
Antonio Suarez cortó la única oreja concedida en la novillada de apertura de la feria del Sol en festejo con entrada gratuita que contó con una buena afluencia de público en tarde en la que debutó con picadores Carlos Sulbarán, alumno de la escuela taurina de Mérida.
Es importante destacar el loable gesto de la Empresa Taurina “Hermanos Rodríguez Jáuregui” de organizar una novillada con picadores, con el aliciente de ser gratuita, siendo un detalle éste importante que vino a demostrar que hay entusiasmo y afición por la fiesta de los toros, con una excelente entrada.
Abrió el festejo un entonado Manolo Vanegas, que se lució en un vibrante tercio de banderillas, donde destacó el aguante a la hora de ejecutar los pares aunque la colocación no fue la más acertada. Se dobló con torería y oficio Vanegas, que aprovechó la inercia del noble novillo de La Cruz de Hierro para enjaretar buenas series con la mano derecha, pero el astado fue a menos y así también el trasteo de un torero voluntarioso y con buen concepto. Su fallo a espadas redujo un posible reconocimiento.
Ángel Miguel Guía al recibir con el capote a su novillo, de Los Marañones, vio como el animal se lesionó una pata en una voltereta. En este caso se vivieron momentos de total desconcierto pues la presidencia ordenó devolver el novillo, sin la existencia de un sobrero, por lo cual en teoría el torero se quedaba sin torear. Tras resolver el desaguisado, la empresa obsequió un sexto novillo, de Campo Pequeño, al que recibió con buenos lances a la verónica, no pasando de voluntarioso con la muleta. Corre bien la mano por momentos, sin embargo no logró centrarse. Detalles sueltos del joven caraqueño, que cumplió con decoro.
Grata impresión dejó en aficionados y profesionales Antonio Suarez, médico de profesión pero con la ilusión de ser torero, la cual se comprobó, tiene buenos y sólidos fundamentos. La lidia de este tercer novillo, fue caótica, con tumbos, caballos de picar resabiados y cuadrillas intentando mantener la calma. Suarez que hasta ese momento no había pasado de discreto, demostró un valor sereno, determinación, buen concepto y oficio. Bien colocado, con el engaño siempre por delante, encajado y asentado, el joven torero cuajó varios muletazos de excelente trazo, siempre por el pitón derecho, pues por el izquierdo se quedaba muy corto su antagonista. Tras una entera defectuosa, cobró media en lo alto fulminante, que dio paso a una merecida oreja.
Debutó con picadores Carlos Silbarán, alumno de la escuela taurina de Mérida, que tuvo una decorosa actuación, emborronada con un pésimo manejo de los aceros. Silbarán demostró sentido lidiador con el capote, voluntad con las banderillas y sitio con la muleta, destacando en varias series de muletazos, largos, de mano baja y llevando con temple a un novillo que embistió con la cara a media altura. El joven debutante sufrió dos fuertes volteretas de las que se levanto sin mirarse, pero su manejo de la espada y el descabello desembocó en una fuerte bronca. Hay que darle un margen de confianza. Por cierto, si debutaba Silbarán con picadores, debía actuar primero su compañero Salas, que ya ha toreado con caballos.
José Antonio Salas pasó un trago amargo durante la lidia del quinto novillo, ante el que se mostró dubitativo. Ya desde la salida del astado, Salas se quedó cruzado y fue achuchado con el capote, situación que se repetiría con la muleta. El novillo, complicado y áspero fue una dura prueba para el torero, que sufrió fuertes volteretas, las cuales minaron su ánimo. Visiblemente superado por las circunstancias, despachó como pudo a su oponente.
FICHA DE LA NOVILLADA
Plaza de toros de Mérida.
Jueves 16 de febrero 2012.
Primera novillada de feria.
Más de media entrada.
Un novillo de La Cruz de Hierro (primero) noble y soso. Cuatro de Campo Pequeño (sexto bis) bien presentados y de juego desigual. Complicados en su mayoría, con movilidad y aspereza. El segundo de Los Marañones fue devuelto a los corrales tras lesionarse la pata trasera derecha.
Pesos: 343, 338, 323, 297 y 343 kilos.
Manolo Vanegas, de rosa y oro (Silencio)
Ángel Miguel Guía, de azul marino y oro (Saludos)
Antonio Suarez, de verde botella y oro (Oreja)
Carlos Sulbarán, de grana y oro (Bronca tras dos avisos)
José Antonio Salas, de azul marino y oro (Silencio)
Destacó en la brega Mauro David Pereira. Cuadra de caballos muy débiles y de poca obediencia. Carlos Sulbarán debutó con picadores con el novillo “Don Fabián”, número 176.
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