Manuel Medina “El Rubi” (izq) y Bernardo Valencia (der): Siempre en plan de triunfadores.
* Lograron moldear una fiesta popular que dio sentido a la tradición por los pueblos.
por: Jesús Ramírez “El Tato”
No quería hacer en esta fecha 24/10 una página tan luctuosa; pero tras la repentina muerte de Bernardo Valencia el pasado martes 18 en este octubre fatídico, cuando nos disponíamos a recordar el aniversario de la muerte de César Girón, nos llega lo del maestro “Antoñete”, y también se marcha el ganadero Alfonso Guardiola Domínguez, que al calor de amigos como César Dao y el fallecido alcalde Paco Cabrera, sembró amistades y cariño en el hermano estado, donde supo compartir y sembrar afecto.
Y recordando las cosas de Bernardo, que seguro dará para muchas cuartillas, y temas de plató para el desaparecido programa “Donde estás corazón”; no podemos dejar a un lado en el recuerdo del torero del Morro, a un torero aragüeño que lleno de coraje y valentía, fue su puntal para el triunfo y la rivalidad en la arena.
Me refiero a Manuel Medina “El Rubi”, quien compartió cientos de tardes por nuestra amplia geografía en las plazas portátiles con el torero del Morro, saliendo a hombros. Se guardaron un profundo respeto profesional y “El Rubi” recuerda con emoción las palabras de Bernardo cuando dijo en “Tierra Blanca” que él había triunfado al lado de todas las figuras, pero que con “El Rubi” todas las tardes tenía que salir a jugársela.
Lo traemos a colación, porque al espada de Cagua que este año cumple 25 años de alternativa lo vimos compungido en la morgue, en el velatorio y en la plaza, acompañando a su amigo y su rival en la arena. Y sin caer en ilógicas comparaciones, si Arruza fue factor de éxito en “Manolete”, “El Rubi” fue un digno rival de Bernardo por nuestras plazas.
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