Plaza de tientas “César Faraco” del Country Club de Mérida. Foto archivo: Giovanni Cegarra.
* en el Country Club de Mérida
por: Víctor Ramírez “Vitico”
En la plaza de tientas “César Faraco” del Country Club de la ciudad de Mérida, se celebró el festival homenaje al desaparecido diestro Bernardo Valencia la tarde del sábado 29 de mayo. A pesar de la lluvia, los alternantes dieron lo mejor de sí en la lidia de becerras de la ganadería El Trébol.
Sirvió el festival también para celebrar un aniversario más del Country Club merideño. Destacó la presencia del mozo de espada Luis Miguel Valencia, hermano de Bernardo que recibió en nombre de la familia Trosel Estévez varios reconocimientos póstumos a la memoria del “Torero de la Emoción”. Un emotivo minuto de aplausos y cerradas ovaciones para el hermano del maestro, dieron fe del gran cariño que en Mérida se le profesó al fallecido matador de toros.
Las becerras de la ganadería El Trébol, fueron complicadas en su mayoría, la de mejor estilo fue la que correspondió al alumno de la escuela taurina de Mérida, Carlos Sulbarán y destacó la tercera para Augusto Rodríguez.
El matador de toros Leonardo Rivera abrió el festival con una chica y blanda becerra a la que lidió con técnica y suavidad, destacando varios naturales de excelente trazo.
Alexander Guillén, pechó con la peor de la tarde, estando solvente, lidiador y en torero.
El aficionado práctico Augusto Rodríguez destacó en una larga faena a una noble becerra a la que lanceó bien a la verónica, toreando con temple y gusto en el tercio final.
El joven novillero Carlos Sulbarán realizó una buena faena a su becerra, la mejor de la tarde, a la que toreó con ritmo y temple en varias series de muletazos de largo trazo. A pesar de que esta en el lógico proceso de formación, se notan grandes avances en el joven alumno de la escuela “Humberto Álvarez”.
Entregado y solvente el ecuatoriano Álvaro Mejía y bien en banderillas los novilleros Jeyson Quintero “Finito de Mérida”, Francisco “Chico” Paredes, y David Osorio, quienes también torearon con la muleta, dejando constancia de sus progresos.
Lluviosa y entretenida tarde taurina en la ciudad de Mérida, donde precisamente estaba anunciado el maestro que fue recordado con respeto, cariño y admiración.
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