Escribir de esa forma, sí es una deshonra para el toro bravo…

* ...que termina en Capea trasnochada, de frustradas intenciones.

Por: Juan Mariano Monasterios Bernal

San Cristóbal 15 de febrero del 2011.

Claro que caben miles de palabras para expresar un criterio taurino con fundamento, razón, y convencimiento de lo que en su corazón taurino puedan atesorar. Sin llegar a tales expresiones y descalificativos de profesionales del Toreo, manifestar públicamente y notoriamente tales epítetos que denigran de tales seres taurinos; lo de chalaos habría que ver si se juzga en qué condición, sin haber estado presente en la plaza de toros Enrico Finellli, y La Plaza de Toros El Torero; sin tener la más mínima idea de lo que aconteció en Valle de La Pascua y Turmero; y cabria entonces preguntarse: ¿Quién es el enemigo de la Fiesta de los toros, ante tan irresponsables maneras de escribir? Contribuyendo, cual fantasma, a desinformar a los lectores en Capeas trasnochadas de frustradas intenciones.

Los Matadores de Toros, así los catalogan ustedes, lo cual los traiciona su subconsciente, para después denigrar de ellos con vocabulario que deja mucho qué desear; en su justa dimensión de lo que realmente sucedió en tan buenas tardes de toros, de la cual sí puedo escribir con propiedad ya que “El Toro Bravo, Toma La Palabra” sí estaba en dichos cosos taurinos, y respecto al silencio de la Asociación de Matadores de Toros y Novillos, les queda en cualquier término, apoyar a sus agremiados en dicha iniciativa que va en concordancia a su libre contratación. Y al conflicto interno de la Unión de Subalternos de Venezuela, es un océano de problemas, y ropa sucia que debe ser lavada en casa. Escribir de tal forma sí considero que es una falta a la ética profesional, que dista muy lejos de la verdad.

Disculpen ustedes caballeros, dichos toreros, ni chalaos, ni deshonrantes de la profesión de Matadores de Toros, la dignificaron hasta tal punto que contribuyeron en el realce del Maestro José Nelo “Morenito de Maracay”. Léase bien “Maestro del Toreo”, al referirse a las cuadrillas que actuaron, entonces también es un chalao el Maestro en tales términos, ya que José Nelo “Morenito de Maracay” permitió, según ustedes, que actuaran chalaos, sinvergüenzas, idos del toro, denigrantes de la fiesta, en sus dos faenas. En capea de deshonor al Toro Bravo; convirtiéndose en cómplice de dicho espectáculo reprobable según su escrito. O es que acaso el Maestro se vistió de Oro para actuar irresponsablemente en una Capea; o peor aún, como ustedes las califican de Bufonadas. Déjenme decirles, que fue todo lo contrario el Maestro y su cuadrilla de Oro, salieron vitoreadas de la Plaza de Toros, y condecorado por el ciudadano Alcalde y con la hermosa dignificación del arte del Toreo.

Señores empresarios: Pongan sus barbas en remojo; viene un tropel de Matadores de Toros, que se prestan a la libre contratación, por lo tanto a la dignificación del arte de Cúchares; ellos son: El Maestro José Nelo “Morenito de Maracay”, Manuel Medina “El Rubí”, Manolo Zapata, Ruiz Manuel, Javier Cardozo y el Rejoneador Rafa Rodríguez, desconsiderados cómplices todos ellos, de estas dos grandes corridas de toros en toda la extensión de la frase; y los culpables, con sumo oficio, del éxito de los alternantes, siendo extraordinarios artífices: Ramón Álvarez “El Porteño”, Juan José Girón, Marcos Peña “El Pino”, Gino Torres “Maravilla”, Luis Prato y Pepe Luis Navarro; dichos toreros de Oro Puro en sus atavíos; los del castoreño: William Hidalgo, Secundino Ramírez y René Quintana, perpetradores de la suerte de vara y con amplio prontuario de colaboradores en el triunfo del matador de turno y de la hermosa fiesta taurina. Los soldados de plata: José Nádales y Norbis García; uno, de vasta experiencia en dichas lides; el otro, un acertadísimo cachetero. Son de mucho cuidado en corridas de verdad, con encierros de presencia, trapío y estampa, acorde a las exigencias de la categoría de las plazas, ganaderos de humildad y afición a raudales, que llevaron toros de bonita presencia y juego. Don Euclides Sánchez y Don Juan Campolargo así como también Don César Villanueva. Gracias señores ganaderos por correr toros de Verdad, Clase y Calidad.

Oído a los clarines y timbales en las venideras ferias taurinas, el cachondeo está a diestra y siniestra, perpetrando un éxito taurino tanto en lo artístico, como en la maravillosa asistencia del soberano en los tendidos; acción a favor absoluto de la fiesta del Toro Bravo. Gente como esta, es la que precisamos en la Venezuela Taurina que deseamos. Enhorabuena Toreros de Oro Puro.

Por favor Caballeros, que escriben desde tan larga distancia, desconociendo la realidad, al no asistir de cuerpo presente, a Valle La Pascua y Turmero, escriben cuales advenedizos.

Que la bella Virgen de La Candelaria interceda por ustedes.

Y que Dios les Bendiga en sus próximos escritos.

Escribir de esa forma, sí es una deshonra para el Toro Bravo…que termina en Capea trasnochada, de frustradas intenciones.

“El Toro Bravo, Toma La Palabra”