Rubén Darío junto a su banderillero de confianza Enrique Martínez en la habitación del Hospital Ramón y Cajal.
por: Franklin Pineda Simancas
La gloria del triunfo pagado con sangre fue el precio desembolsado por Rubén Darío Estévez este domingo 14 de Septiembre en Colmenar del Arroyo, provincia de Madrid, donde el torero venezolano hizo el paseíllo junto al novillero José Antonio Carreiro; se corrieron toros de la ganadería «Casasola».
Desafortunadamente a la hora de entrar a matar su primer toro, sufrió una aparatosa cornada lo cual ameritó ser operado en la enfermería de la misma plaza de toros para luego trasladarlo al hospital Ramón y Cajal de Madrid donde se encuentra bajo observación médica.
El parte médico del cirujano Danil Vega que lo atendió es:
Dos cornadas, la primera en la parte inferior del muslo derecho con dos trayectoria una ascendente de 16 centímetros y otra descendentes de 8 centímetro afectando del musculo femoral en pronóstico reservado, la otra cornada de seis centímetros en la región escrotal con exposición testicular menos grave.
El coleta valenciano nos comenta «estar un poco adolorido, pero su ilusión de triunfar sigue igual, pensando en su recuperación y así estar a tono para su presentación en la venidera feria de la virgen del Socorro en Valencia en el mes de noviembre».
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