Admirable actividad toreros venezolanos en plazas del Perú

Rafael Orellana, Fabio Castañeda, así como los demás toreros venezolanos triunfan y se preparan en Perú

El apunte es para  aquel que osando bañarse en  aguas profundas se atragantó del vital líquido, exponiendo el escaso conocimiento taurino…

Por. Freddy Ramírez “Garapuyo”

La actividad de los  toreros  venezolanos en ruedos del Perú, es admirable, si tomamos en cuenta   que a cada instante  exponen sus vidas en los miles y  miles de kilómetros que tienen que transitar por  las serpenteantes y  peligrosas   carreteras, -solo nombrar los sitios por donde  se transitan da vértigo, terror; en Venezuela, creo,  no haber visto precipicios de la magnitud que se ven por las carreteras del Perú. 

Más que admirable,  heroico la actividad taurina de cualquier torero que ose entrar en el circuito taurino peruano, sus  vidas penden por un lado de la pericia de los conductores y del buen estado de los  autos,  buses que les llevan a las plazas; de los toros que en ocasiones saltan a las arenas con visos de haber sido toreados, como si fuera poco en la mayoría de las plazas de aquellos pueblos no cuentan con servicios médicos y  ahora para colmo en algunas plazas existe un público xenófobo con nuestros toreros.

Toros bravos. 

Que salen toros muy bravos, encastados y enrazados con la presencia arrogante de los 4 años, sí y en muchísimas plazas; que salen  malos y  toros moruchos,  también,  -como en todas partes del mundo taurino-  que se triunfa, sí; que se disfruta toreando, sí; que se gana dinero, sí,  el necesario para que hoy  muchos tengan casa  en Venezuela junto a la remesa de dinero mitigando así la miseria que impera en nuestro país,  gracias al toro del Perú; también existe  los que no se valorizan toreando  por cuatro soles.

Por cierto en el Perú como en todos los países que se dan toros, el mejor torero; el de más actitud; el mejor estoqueador; el siempre triunfador,  -poquitos por cierto-  son los que más cobran y los que más suman fechas.

Aprendizaje. 

Que  se aprende y se adquiere oficio,  sí y mucho;  qué el Perú es un centro,  punto de entrenamiento y de preparación para cualquier diestro,  tan cierto es,  que los cosos del Perú han sido  tomados por  toreros, sobre todo para aquellos que piensan y sueñan en  grande, ejemplos, muchos,  como los de hoy día,  toreros emergentes  que  ocupan puestos de privilegio en las grandes ferias.

Preparando el salto. 

Que hay toreros que aún no se atreven a dar el gran paso a otras plazas de mayor jerarquía,  como ir en pos de una confirmación en la primerísima plaza, sencillo, a las Ventas hay que ir  muy seguro, con la humildad,  la sencillez, muy al natural, siendo fiel a sus principios; ir con  la mayor preparación, física, síquica y  mental… lo demás  lo pondrá el torero, con su capacidad para torear el  toro “comercial” o uno complicado o aquel de las corridas duras. Acá en Las Ventas  también  se triunfa   con toros que han embestido medianamente en  ocho o nueve ocasiones,   donde el torero con 11 o menos muletazos de intenso trazo,  ejecutando la última suerte en todo lo alto han cortado una y las dos orejas  saliendo por la puerta grande. 

Reservorio Mundial. 

Valga el apunte para  aquel  por la Mérida taurina (Venezuela)   que osando bañarse en  aguas profundas se atragantó del vital líquido,  exponiendo a la luz el  poquito o escaso conocimiento taurino, desconociendo  por entero  la historia taurina del Perú,  su  gloria,  grandeza  con 500  años y más  de fiesta del toro, auténtico reservorio del torero mundial. El personaje   exige  a toreros venezolanos  como  Rafael Orellana ir en pos  de  plazas de categoría e  importancia  del orbe taurino y no  aquellas del Perú  donde toreros venezolanos luchan, triunfan y se preparan.  

El objetivo.

Para   Rafael Orellana y otros  es punto de honor, anhelo e ilusión  la confirmación  de alternativa en Las Ventas de Madrid -es el sueño de todos los toreros-  e ir en pos de otras plazas del orbe taurino; el venezolano  con  212 corridas  en su haber, 100  de ellas en Perú y 10 años o más  de alternativa, sitio en el tiempo  donde el torero de Venezuela  apenas empieza a disfrutar de su toreo. Los tiempos buenos están por venir… créanlo, con la preparación, madurez, oficio que está adquiriendo  Rafael Orellana en  plazas del Perú, el objetivo  está a la vuelta de corrales…