Una oreja en la segunda de feria de Tovar

Sólo Valenzuela pudo con San José de Bolívar. Foto: J. Cepeda

Por: Jorge Cepeda

Una oreja en la segunda de feria de Tovar

Sólo Valenzuela pudo con San José de Bolívar

Por: Jorge Cepeda

Se realizó la segunda corrida de la 169º Feria de Tovar donde el encierro de San José de Bolívar no respondió a las expectativas y los buenos deseos del ganadero porque sus toros dieran la buena nota, aunque se presentó un encierro de buen peso, de bonita lámina; pero que no respondieron; solamente Eduardo Valenzuela que tuvo las de cal y las de arena, con un buen toro que se le dio la vuelta al ruedo a sus despojos logró cortar una oreja; y en su segundo un toro sin clase, oyó los tres recados; pero murió en el ruedo.

Actuaron con Valenzuela el más antiguo César Vanegas (Palmas y silencio) y el debutante mejicano Antonio García “El Chihuahua” (Palmas y fuerte petición de oreja). El rejoneador Francisco Javier Rodríguez perdió trofeos por la hoja de peral y oyó un recado. Hubo tres cuartos de entrada en los tendidos y una brisa al comienzo del festejo que refrescó la tarde.

César Vanegas
El torero venezolano en el que abrió la tarde en las primeras de cambio este presentó problemas y saltó dos veces al callejón generando pánico en los presentes. Se llevó por delante al peón de confianza José Antequera sin consecuencias qué lamentar; dejó buenos pares de banderillas que gustaron al público; con la muleta se dobló y lo probó por ambos pitones y notó la poca potabilidad que presentaba en el último tercio por lo que abrevió con la espada. Con su segundo, nuevamente otro que poco le colaboró; aunque con mucha entrega, logró buenas tandas por la derecha para que le dieran la música; fue una pena que su estocada fue caída y no pudo lograr triunfar.


Eduardo Valenzuela
Estuvo muy centrado y con mucha pausa con el primero, si se quiere el más potable del encierro, donde lució en banderillas; con la muleta logró cuajar una buena faena sobre ambas manos; con una buena estocada y un descabello, le dieron la oreja. Con el quinto o segundo de su lote: un toro jabonero, precioso de estampa, recibió una fuerte vara y se fue a menos; llegó al último tercio punteando y con poca fuerza por lo que se fue a tablas; entonces, el torero nacional le dio una faena de aliño y le costó meter la espada; oyó los recados aunque el toro doblo y murió en el ruedo.


El Chihuahua
El debutante mejicano con su primero estuvo muy torero, sobre todo con un quite en los medios que a los presentes les gustó; con las banderillas dejó tres buenos pares que fueron ovacionados; con la muleta el toro se rajó pronto y se fue a tablas por lo que abrevió.
Con su segundo, nuevamente sus deseos de triunfo se esfumaron, aunque logró gustar al público por su entrega; con una estocada entera despachó pronto y le pidieron trofeo pero no fue otorgado por las autoridades taurinas por lo que oyeron una fuerte pita.


Francisco Javier Rodríguez
El rejoneador yaracuyano estuvo bien, con mucho dominio en sus jacas con las que se presentó ante un toro que le permitió estar realmente bien; dejó buenos rejones de castigo y buenas banderillas en todo lo alto; destacó una con par a dos manos; fue una pena que no remató con la estocada y por sus deseos de triunfo fue arrollado sin consecuencias.