En 2017, la Asociación de Ganaderos del Táchira, le condecoró como Ganadero del Año Foto: Asogata
Hugo Domingo Molina es uno de los hombres más importantes que ha tenido la fiesta de los toros en Venezuela, un taurino total, visionario, que supo sembrar en tierra fértil, y con la importancia de que fue él, quien hizo crecer la flor, gracias a que fue capaz de soñar, visualizar y crear.
Inteligente, con talento y capacidad, supo encauzar los deseos de la afición, buscó buenos ejemplos, llenó las alforjas con sueños e ilusiones, alimentó ideas y las concretó, haciendo crecer la fiesta de toros en nuestro país.
Como ganadero, fue un auténtico alquimista, que transformaba ideas en realidades, fue un criador que entendió que criar toros bravos es una pasión que llena la vida, que requiere pasión, paciencia, ilusión, trabajo y sacrificio. Por ello es uno de los ganaderos más importantes y reconocidos de la historia.
Amable y cariñoso, era muy cercano y fácil en el trato. Admirado, querido y respetado -se dice fácil- por todo el toreo, su obra ha sido inmensa. Ahora, desde las alturas seguirá de cerca todo lo que acontece con la tauromaquia. El compromiso es enorme, pues se trata de estar a la altura de lo que él hubiese esperado de aquellos quienes deberán seguir con su legado.
Hugo Domingo Molina es, sin duda alguna, uno de los grandes gigantes de la tauromaquia.
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