Por: Kike Rosales
En la ganadería de Zalduendo, en Cáceres (España), Antonio Suárez invitado a estar tentando unas vacas y matar un toro de la ganadería, volvió a mostrar las condiciones que tiene para ser torero; el sabor dejado por el tachirense en el paladar de los ganaderos es de muy buen gusto; la “despaciosidad” y la dulzura de la muleta es lo que se queda en la retina y en el corazón de quienes lo vieron en la ganadería.
La presentación ante toros de mucho cuajo en el campo indica que Suárez tendrá ya temporada con caballos el año 2014; la idea del “Gallo de Morón”, su mentor en España, es llevarlo a la calladita para comenzar a irse por las novilladas con picadores. La ansiedad de Antonio es comenzar a hacerlo; total, dejó de ser médico para volverse matador. ¿Puede más un estoque que un escalpelo? Suárez será el encargado de esa respuesta en este, su obcecado afán de ser torero.
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