Los buenos toreros lo son siempre, pero el tiempo les da solera, convierte sus virtudes en maestría y les permite incluso muchas veces estar por encima del bien y del mal. Un maestro desde que se ve llegar a un patio de cuadrillas desprende ese halo de torería y capacidad que les da sello ante el aficionado y admiración entre los profesionales.
En las filas de plata, Gerson Guerrero se distingue por su buen concepto del toreo, con mano suave para el toro que lo amerita y con mando para el enrazado; todo hecho en torero, con clase y temple. El buen banderillero se distingue por su capote, ese es el que lo pone en figura, aunque las banderillas sean más espectaculares, suerte que domina perfectamente Guerrero, pareando con oficio y rapidez.
En los últimos años este buen torero tachirense destaca por el conocimiento de los terrenos, su perfecta colocación y un toreo cada vez más largo, lo cual agradecen mucho sus jefes de filas que pueden ver las virtudes de los toros y comprender mejor las embestidas.
Esta temporada sin duda marca un salto para Gerson Guerrero que ve como cada día, en cada feria su saber estar en la plaza se le reconoce. Tres trofeos consecutivos entre agosto y septiembre 2023, al mejor torero de plata en la brega en las ferias de Táriba, La Grita y Tovar, son una muestra de su crecimiento, madurez y eficacia.
Estas virtudes que se suman al oficio de muchos años de profesional, que compagina con la labor pedagógica en la Escuela Taurina “César Faraco” de la cual fue alumno aventajado. Gerson Guerrero, un gran torero de plata que brilla como el oro en cada tarde de toros.
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