El diestro venezolano José Miguel Parra qué hace vida en el México taurino, viene haciendo tentaderos en el campo bravo azteca, en procura de encontrarse con su toreo y afinar su tauromaquia de cara a próximos compromisos en territorio manito.
El coleta andino, cuya alternativa recibiera de manos del maestro Enrique Ponce, justamente el día de su cumpleaños, el 27 de enero del ya lejano 2011 lidiando en el marco de la feria de San Cristóbal, a Platerito de la ganadería de El Prado, viene haciendo esta preparación con mucha seriedad y respeto hacia su profesión.
Ha sido la Hacienda El Batán, propiedad del ganadero mexicano Paco Aguilar, dónde Parra se ha sentido en torero y muy a gusto con las dos vacas que lidió, instrumentando muletazos por bajo, vaciando cada uno de ellos por la espalda, con mucha quietud y profundidad en cada tanda.
Este tentadero del torero José Miguel Parra, quien lleva muchos años en México, más allá de encontrarse consigo mismo y con su arte, ese que atesora en su muleta, le motiva e ilusiona, para avanzar en su preparación en este país norteamericano y por supuesto para regresar a Venezuela, dónde espera más pronto que tarde, hacer el pasillo en las ferias grandes de esa nación, como San Cristóbal Mérida y Tovar.
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