Ángel Ramos, a base de empeño y arrojo, logra arrancarle la oreja única del festejo al de Cruz de Hierro: "Príncipe Gris" que se dejó robar tandas que alegraron la tarde de los peligrosos toros de Don Echenagusia.
por: César Omaña / Director de venezuelataurina.com
Tovar.- La primera de feria de La Sultana del Mocotíesv se realizó con una serie de actos previos al paseíllo iniciando con la develación de una placa en honor a Oscar Labrador, querido presidente de edta Comisión Taurina que falleciera en febrero pasado. La misma se ubica en una de las paredes del patio de cuadrillas y llevó las palabras de exaltación de la memoria de Oscarino el presidente de la Comisión Rubén Morales, teniendo presente a un hijo del muy querido taurino quien será recordado por siempre en esta plaza del Coliseo El Llano.
Luego hubo la coronación de la Reina Taurina, la procesión de la Virgen de Regla y la bendición a la feria taurina por parte del párroco del pueblo.
EL ENCIERRO DE LA CRUZ DE HIERRO
Los toros de la familia Echenagusia fueron con presencia de pelaje negro y Cárdenos pero que se apagaron pronto en general, a excepción del primero para Ramos en su Alternativa. Corrida con Mucho peligro por las medias arrancadas y parones de marmolillo. Sufrieron cogidas Tomás en su primero, sin consecuencias; y la más dura sería para Veyrunes en su segundo.
pero que llevaron por la ca
Jonathan Veyrunes, tabaco y oro: Enfrentó a un mando que dio complicaciones desde la salida; con medias arrancadas el burro Nitro permitió el lucimiento del francés que lo estuvo cazando en toda la lidia. En la suerte suprema luchó para buscar la igualada que tardó para cobrarle un aviso.
En su segundo le aprovechó el empuje de salida para meterlo en su capa por verónicas coreadas por el tendido; lo brindó al público de nuevo y en la muleta se rajó pronto convirtiéndose en un marmolillo que no se arrancaba a su muleta; pero sabiendo que era su última oportunidad de triunfo insistió sin lograr que se arrancará y al retirarse perdiéndole la cara, se le arrancó "Rey Charro" cogiéndolo por la taleguilla y arrastrándole unos metros; al quitárselo Veyrunes se levantó mostrando dolor en su pierna izquierda pero sin sangrar y rota la taleguilla a la altura del muslo izquierdo. Fue llevado a enfermería. Lo pasaportó Tomás Martínez de certero bajonazo efectivo pa quitárselo rápido.
En su segundo le aprovechó el empuje de salida para meterlo en su capa por verónicas coreadas por el tendido; lo brindó al público de nuevo y en la muleta se rajó pronto convirtiéndose en un marmolillo que no se arrancaba a su muleta; pero sabiendo que era su última oportunidad de triunfo insistió sin lograr que se arrancará y al retirarse perdiéndole la cara, se le arrancó "Rey Charro" cogiéndolo por la taleguilla y arrastrándole unos metros; al quitárselo Veyrunes se levantó mostrando dolor en su pierna izquierda pero sin sangrar y rota la taleguilla a la altura del muslo izquierdo. Fue llevado a enfermería. Lo pasaportó Tomás Martínez de certero bajonazo efectivo pa quitárselo rápido.
Tomás Martínez, verde botella y oro: Recibió con una larga cambiada de rodillas para luego lancearle a la verónica. La lidia se embarulló en banderillas con pases en falso dé los subalternos porque "Amor Cobarde" se paró quedando sin recorrido para la suerte; Tomás quiso abreviar con un solo par pero la autoridad no hizo caso de su petición lo cual pagaría mas tarde en una cogida espeluznante que lo llevó sentado en la pala del pitón izquierdo al tratar de improvisar un pase cambiado que de lejos parecía que fuera ensartado en el glúteo. Apenas le pudo robar unos muletazos sueltos al de Cruz de Hierro que precisamente fue al ganadero Pedro Echenagusia a quien lo brindó. Creyó el torero que tomando la espada se lo iba a quitar de encima y ahí comenzó su calvario. Un aviso y silencio.
En su segundo toro el de Tovar como por todas pero se estrelló con otro de igual comportamiento que apenas se dejó Tovar algunos pases que el soberano jaleó con oles que le animaron a buscar más agua de un poso seco
En su segundo toro el de Tovar como por todas pero se estrelló con otro de igual comportamiento que apenas se dejó Tovar algunos pases que el soberano jaleó con oles que le animaron a buscar más agua de un poso seco
Ángel Ramos, pistacho y oro: Palmas; tomó la Alternativa con el toro As de Copas que fue bien a las telas q torear ganándose la música luego de hilvanar series con la derecha. La espada no le acompañó pinchando en varias ocasiones sin embargo logró una estocada que luego le valió las Palmas del público.
En el sexto, cuando ya nadie daba un duro por lo que restaba de la tarde con estos bureles que cazaban al torero, ÁNGEL RAMOS como que no se rendía ante tanta mala suerte donde se comprobó que los toros son como los melones. "Príncipe Gris" embestía con rabia y aún así Ramos cogió los rehiletes y se embolsilló los tendidos. Tuvo una colaboración de mucha gente cada vez que clavaba un par lo asistieron para quitarle el tren bala que se le venía. Luego a la muleta lo metió ellas primeras tandas y se vino arriba con el arrimón que se pegó; la banda se arrancó a tocar y pudo ligar unas tandas más antes de apagarse y pararse como sus hermanos. En la suerte suprema no se lo pensó mucho y a la primera dejó una estocada en buen sitio y aunque no cayó en le siguiente viaje sí. Los pañuelos agloraron como epidemia y la autoridad debió reconocer el mérito del nuevo matador de toros Ángel Ramos.
En el sexto, cuando ya nadie daba un duro por lo que restaba de la tarde con estos bureles que cazaban al torero, ÁNGEL RAMOS como que no se rendía ante tanta mala suerte donde se comprobó que los toros son como los melones. "Príncipe Gris" embestía con rabia y aún así Ramos cogió los rehiletes y se embolsilló los tendidos. Tuvo una colaboración de mucha gente cada vez que clavaba un par lo asistieron para quitarle el tren bala que se le venía. Luego a la muleta lo metió ellas primeras tandas y se vino arriba con el arrimón que se pegó; la banda se arrancó a tocar y pudo ligar unas tandas más antes de apagarse y pararse como sus hermanos. En la suerte suprema no se lo pensó mucho y a la primera dejó una estocada en buen sitio y aunque no cayó en le siguiente viaje sí. Los pañuelos agloraron como epidemia y la autoridad debió reconocer el mérito del nuevo matador de toros Ángel Ramos.
Al terminar el festejo los médicos de plaza informaron que Veyrunes tuvo cornada superficial de dos trayectorias ameeitando unos cuatro centímetros cada una pero que ya el torero se encontraba bien de ánimos y que bromeaba antes de ser trasladado a una clínica cercana a donde pasará la noche en observación para asegurarse de una buena recuperacion.
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