por: César Omaña
Director de venezuelataurina.com
Este viernes 18/9 en horas de la noche murió a causa de un arrollamiento, el torero de plata retirado Rafael Eusebio Jiménez Garrido, “Rafita”; practicando su actividad regular de entrenamiento deportivo en bicicleta, fue embestido por un automóvil en la ciudad de Cúcuta (Colombia)
Nos cuenta Don Jairo Cadena, torero colombiano en retiro y activo gremialista, que Rafita tenía tres años de haberse retirado del toreo de plata y contaba con 63 años de edad; en su actividad profesional en Colombia, Rafita acompañó en las cuadrillas a las principales figuras del toreo que actuaron en las diferentes ferias neogranadinas.
En Venezuela, Rafael Eusebio Jiménez Garrido estuvo actuando en las filas de El Maraco; actuó en las Ferias de Maracaibo y Tovar, entre otras.
Rafita fue un subalterno de gran importancia en Colombia; afirma Jairo Cadena: “Era todo un caballero dentro y fuera del ruedo, ganándose el aprecio de mucha gente del sector taurino” En mi tiempo de novillero Rafita me acompañó como mi subalterno en La Grita (Estado Táchira)
En su cuenta de Facebook, don Jairo dice:
"Se nos fue un gran amigo, un hermano, el gran Señor y Caballero dentro y fuera del ruedo; el gran profesional; cuántos recuerdos hermosos cuando nos jugábamos la vida en las diferentes plazas y salíamos victoriosos o en otras derrotados; pero siempre había un enhorabuena en sus labios.
Fueron 30 años compartiendo esta hermosa profesión y 45 años en total compartiendo su agradable amistad.
RAFITA: Dejas un vacio en mi corazón y sólo le ruego a mi Diosito para que le dé un lugar de privilegio como te lo mereces.
PAZ EN SU TUMBA MI HERMANO RAFAEL EUSEBIO GIMENEZ GARRIDO"
La tauromaquia colombiana pierde a un gran torero con el fallecimiento de Rafael Eusebio Jiménez Garrido, “Rafita”. En Venezuela también se le echará de menos en las filas de los toreros de plata.
Paz a su Alma
Como en la canción "La cama vacía", hoy domingo 2 de octubre
ResponderBorrarvoy a visitar mi gran amigo Rafael Eusebio jimenez gran torero de plata, pero con un corazón de oro, una personalidad indiscutible de los grandes amigos, reconocido en el medio taurino por su don de gentes y garbo al martillar los palitroques con escultural donosura, quitándole sin proponérselo la gloria del matador, pues se nos fue. Hoy a un año largo me entero de la tragedia, llenándome de infinita tristeza.
Al gran amigo, al que mata con el corazón.
Hugo Moreno Luengas - Alí Bator