por: Jesús Ramírez “El Tato”
Cuando el optimismo no falla los objetivos se logran. Bajo esa premisa, el joven aragüeño Salvador Moreno, banderillero de lujo, se dispone retomar las filas novilleriles que con éxito ocupó hace varias temporadas con su artístico toreo de capote, las banderillas en todo lo alto y temple en la roja pañosa.
Señala el optimista Moreno, que cumplirá los compromisos contraídos con la Asociación de Picadores y Banderilleros de Venezuela hasta el mes de diciembre e inmediatamente se volcará en lo que será una avanzada profesional como novillero, que habrá de llevarle por plazas peruanas a partir del mes marzo, ya que espera, como aragüeño, ser tomado en cuenta en la novillada ferial de San José.
Moreno se siente agradecido por el apoyo que le vienen brindando entre otros, los matadores Gregorio Torres “Maravilla” y Eduardo Valenzuela, quienes le han abierto el camino en tentaderos y sabios consejos.
Refiere que ya cuenta con un influyente apoderado que le hará mas expedito el espinoso camino novilleril y que así mismo ya tiene el traje de luces y avíos necesarios para asumir la nueva responsabilidad profesional.
Cuando le señalamos las dificultades existentes y la gran problemática que afecta la fiesta brava en todo el mundo, acota optimista, que dificultades siempre han existido y que tiene todo muy claro para avanzar y convencer con su decisión. “Es un sueño que quiero cumplir gracias a ese gusanito que nunca muere”.
Salvador Moreno es en la actualidad uno de los mas destacados subalternos de la Asociación que dirige Gerson Guerrero. Con juventud y enormes deseos va a cambiar a partir del mes de enero la plata por el oro en el traje de luces, aferrado a una decisión trascendental que lo llevará por tierras incas para satisfacer, -nos dice- una necesidad profesional.
Recordamos que este profesional aragüeño fue formado en la Escuela Taurina “Don Pedro Pineda” de Maracay, por los maestros Eduardo Arcila y Efraín Girón, logrando el debut como novillero en la maestranza el 13 de septiembre de 2002 con novillos de “Tarapío” cortando una oreja al bravo “Indiano” número 57. La lucha sigue con mas ganas, enfatiza Salvador Moreno.
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