por: Giovanni Cegarra
La constancia, perseverancia, paciencia, dedicación, voluntad, esfuerzo, camaradería, amistad, compañerismo, afición y pasión, son la bandera de la fructífera labor de formación de los nuevos valores de la Cantera Taurina Venezolana, en cinco años de existencia, de la Escuela Taurina Humberto Alvarez de Mérida, Estado Mérida, Región Los Andes de Venezuela, cuya sede está en el Patio de Cuadrillas César Faraco de la Plaza de Toros Monumental Román Eduardo Sandia.
Desde su refundación, el catorce de mayo del 2009, tras la partida al reino celestial del Maestro Humberto "Humbertico" Alvarez, fundador de la primera Escuela bajo el nombre de César Faraco, la actual Escuela Taurina Merideña ha estado activa durante sus cinco años de vida, con una plantilla regular de alumnos, quienes contando con el apoyo incondicional de sus padres y representantes, como de la Comisión Taurina Municipal del Libertador, COREALSA, toreros y aficionados merideños, ganaderos de lidia andinos y centro del país, comparten de lunes a viernes, cumplidos sus deberes escolares, con el aprendizaje de lo del mundo del toro.
De lunes a viernes el entrenamiento es constante por parte de los alumnos
Piedra angular de la Humberto Alvarez ha sido sin lugar a dudas, el Subalterno Maestro Instructor merideño Fabián Ramírez, quien con su santa paciencia, lidia diariamente con los niños y adolescentes, que desean hacerse profesionales del toro, tarea que no ha sido tan fácil como quizás algunos pudieran creerlo, ya que sus alumnos, ni son mansos ni son corderitos, cada uno, tiene su carácter, que indudablemente hay que saber capotear, para hacerles entender que lo del toro, no es un juego ni de figurón.
La Escuela Taurina Humberto Alvarez de Mérida, en la Monumental Román Eduardo Sandia, en cinco años, ha sembrado la semilla de los futuros nuevos valores de la Cantera Taurina de Venezuela. Tiene en su haber la organización de ocho novilladas sin picadores, festivales, tientas, vendimias familiares, en el coso taurino merideño.
Algunos de sus alumnos han tenido destacada actuación, saboreando el triunfo, en Ferias Taurinas Venezolanas, como la de Biscucuy en el Estado Portuguesa; la de Santa Rita en el Estado Zulia; la de La Grita y Seboruco en el Estado Táchira; en Maracay del Estado Aragua; en la Feria de San Sebastián del Estado Táchira; en la Feria de Santa Elena en Caño Zancudo, de Virgen de Regla en Tovar y la Feria del Sol en el Estado Mérida. Dos de sus alumnos, David Osorio David de Torres y Carlos Sulbarán, se abren camino en ruedos de la provincia del Perú.
Indudablemente, falta mucho por hacer y ahí está, la esencia de reto. No todos los alumnos, se convertirán en matadores de toros, algunos serán novilleros, banderilleros, subalternos, picadores, sastres, veedores, hasta miembros de Comisiones Taurinas.
En la arenilla del ruedo, en las gradas, áreas internas de la Plaza de Toros Monumental Román Eduardo Sandia de Mérida, se siente, cada tarde, como en la Escuela Taurina Humberto Alvarez, va germinando la semilla de los nuevos valores de la Cantera Taurina Venezolana.
Honor a quien honor se merece, respeto a quien respeto se merece, se lo sabe ganar con voluntad, esfuerzo, trabajo, factor predominante en la Escuela Taurina Merideña, que dignifica por todo lo alto, la Fiesta Brava en Venezuela.
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