Buen preámbulo con el grupo flamenco Amorcito Gitano en los exteriores de la plaza .
por: Jesús Ramírez “El Tato”
El cielo entoldado no fue impedimento para que los aficionados aragüeños respaldaran el cartel del domingo 5 de junio en la maestranza. Una corrida que era promesa de triunfo y de novedosa organización, casi se va al traste por el comportamiento de los toros, desigualmente presentados, poniendo en apuros a la empresa que tuvo que recurrir a uno del hierro de “Rancho Alegre” para completar el encierro. “Laguna Blanca” que venía con el gran cartel del 31 de octubre pasado, en esta oportunidad no pudo saciar los estómagos toristas con sus variopintos ejemplares de los cuales dos sacaron la cara para facilitar el triunfo del sevillano Escribano que sigue creciendo con pasta de ídolo para alcanzar la huella dejada en esta plaza por su paisano Tomás Campuzano.
En tres oportunidades sonó la música y la afición estuvo animada con las cuatro orejas cortadas por el sevillano Manuel Escribano y la oreja que recibió Erick Cortéz en el segundo de la jornada.
“LUIS DE ARAGUA”
“Luís de Aragua” muy bien vestido de azul turquesa y oro tuvo un primer ejemplar complicado, tanto que no quería pasar, amagaba y se quedaba corto y para colmos, cuando parecía que pasaba se revolvía con la rapidez del escalofrío. El toro dejó claro al matador que no había espacio para florituras y tras algunos muletazos por bajo lo despachó entre el silencio general. Un marrajo fue el otro en medio de incertidumbre y para que tratar de extraer zumo de unas uvas secas. Efectivo estuvo Luís con la espada ¡menos mal!
OREJA A CORTEZ
No era el derecho el mejor pitón del primer oponente de Erick: sin embargo, por allí le instrumentó varias tandas que obligaron la música, luego con temple y mimo supo endilgarle naturales ya con el público nuevamente conquistado. Fue tesonera la labor del moreno diestro que salió al ruedo dispuesto a sacar rédito a la tarde dejando patente su disposición y seria actitud. Despachó de efectivo espadazo y los pañuelos hicieron buen preámbulo a la oreja que otorgó usía. El quinto fue un colorado chorreado, sin un pase, parado y recorriendo con la mirada todo el ruedo. Con decoro salió de él con cabal uso de la espada ante respetuoso silencio. Algo importante para Cortéz, porque ha sabido ganarse en la arena el respeto y cariño de la afición aragueña, otrora muy cicatera con su trayectoria.
CONSAGRACION DE ESCRIBANO
Con su entrega y decisión, escala Manuel Escribano los difíciles peldaños de la idolatría que en esta plaza poseyó otro sevillano, Tomás Campuzano. La del domingo fue tarde consagratoria con dos faenas musicalizadas a base de derechazos, naturales, manoletinas, largas de rodillas, pases de pecho y dos certeras estocadas que tiraron patas arriba a sus astados de “Laguna Blanca”. El público aragueño supo compenetrarse con la labor del espigado diestro hispano que también en banderillas redondeó el éxito en pares de exposición y lucimiento. Tras doblar el sexto, y recibir las dos orejas, Manuel Escribano fue alzado a hombros y sacado así de la plaza. Un triunfo contundente que afirma el gran momento profesional que atesora este espada, que pide paso con éxitos rotundos.
TIPS DE LA CORRIDA
Ya cuando la corrida estaba en el sexto toro, con Escribano toreando en los medios, un grupúsculo de antis que habían estado merodeando por la plaza, irrumpió por la fuerza en la puerta de la barrera A, blandiendo los garrotes de la intolerancia, con las pancartas de la demagogia, hasta donde llegaron con su descaro y abuso, para ser repelidos inmediatamente por las fuerzas policiales y por varios aficionados que los echaron del recinto. Luego la corrida continuó con el triunfo de Escribano y los comentarios de los aficionados en la calle, indignados por el vino amargo servido en esta ocasión por una veintena de jóvenes, -no son mas-, que actúan como marionetas mal dirigidas y con estas actitudes violentas e inconscientes no convencen a nadie.
***La joven empresa organizadora de la corrida echo mano a buenos recursos publicitarios y tuvo buen tacto para convocar a la afición por todos los medios. El ambiente previo a la corrida fue motivante con una tarima en el exterior de la plaza por la avenida 19 de abril con balie flamenco y la voz del tenor Darío Castillo. Buena señal de creatividad tan indispensable en todos los ordenes en tiempos de crisis.
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