Este 18-11, Valencia tendrá la ocasión de admirar a un torero que es insignia para la torería andante, forjador de nuevas ilusiones y ejemplo para las nuevas generaciones Foto: torosennavarra.com
Por: Víctor Ramírez “Vitico”
Muchas veces escuchamos aquello de que “no hay mal que por bien no venga” y Juan José Padilla es el mejor ejemplo de esta afirmación, pues tras la brutal cornada sufrida en la feria de Zaragoza el 7 de octubre de 2011 por el toro “Marqués”, número 22, cárdeno con 508 kilos, de la ganadería de Ana Romero, donde perdió la visión del ojo izquierdo, se le abrieron literalmente los caminos, y el honrado torero gaditano realizó la mejor temporada de su vida, tras 18 años de alternativa.
Desde su reaparición en Olivenza, donde con toda justicia salió a hombros hasta el broche en Jaén, “El Ciclón de Jerez” derrochó no sólo ganas, valor, oficio y afición, sino un concepto refinado y estilizado de su aguerrido toreo, en parte porque pudo enfrentar toros de características diferentes a los que habitualmente debe estoquear.
Curtido en miuras, palhas, victorinos, yonnet , murcas, murteiras y demás, verse ante los toros de la figuras, le permitió hacer una campaña memorable, donde demostró que el hombre es capaz de sobreponerse a las dificultades de la vida. Sin duda es un verdadero héroe Padilla, que nuevamente escapó de la muerte para florecer a la vida.
Valencia tendrá la ocasión de admirar en directo a un torero que es insignia para la torería andante, forjador de nuevas ilusiones y ejemplo para las nuevas generaciones, cuando el domingo 18 de noviembre, enfrente toros colombianos de El Capiro junto al maestro José Nelo “Morenito de Maracay”, David Fandila “El Fandi” y el rejoneador Francisco Javier Rodríguez.
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