El novillero merideño, estuvo muy centrado con su novillo pese a su poca actividad* Buenos los novillos de Los Aránguez
por: Jorge Cepeda
La novillada de Feria en la Sultana del Mocotíes se desarrolló en la noche de este jueves 09 de Septiembre 2010 dando el inicio de la tradicional temporada taurina; se lidiaron novillos de la ganadería venezolana Los Aránguez, los cuales fueron bien presentados, se prestaron en su mayoría para el lucimiento de los alternantes, quienes con lo amellada de sus espadas no redondearon sus triunfos; solamente Jónathan Guillén con un buen espadazo, obtuvo las dos orejas de un bravo ejemplar que mereció los honores de la vuelta al ruedo a sus despojos.
En el festejo actuaron:
- El rejoneador venezolano Willy Rodríguez (palmas),
- Jónathan Guillén: dos orejas,
- Fernando Labastida: Palmas,
- Manolo Vanegas: Palmas,
- Tomás Martínez: palmas tras aviso y
- Jesús Colombo: Palmas.
Hubo mucha lluvia por lo cual se pudo observar el poco mantenimiento que tiene la estructura del Coliseo El Llano; parecía un colador, la gente corría a buscar refugio qué pena. La entrada estuvo buena: algo mas de media plaza cubierta.
Willy Rodríguez
Abrió plaza y la feria tovareña el rejoneador Willly Rodríguez luego del desfile de la reina por el anillo de la plaza con su comitiva y la imagen de la Virgen de Regla. El novillo salió andarín pero a través de la lidia fue mermado de condiciones y se fue a tablas; el rejoneador solamente colocó un rejón de castigo y lució en banderillas, pese a lo poco potable del ejemplar; dejó cortas de una en una pero, todo hecho por el caballero. Se fue de un pinchazo y estocada caída.
Jhónatan Guillén
El novillero merideño, estuvo muy centrado con su novillo pese a su poca actividad; lucido con el capote y con la muleta logró cuajar una faena por el pitón izquierdo; pitón de ensueño y que le permitió estar bien; por la derecha le faltó mas entrega y sólo logró muletazos aislados. Con estocada entera se facilitó que le dieran las dos orejas, las que paseo por la periferia.
Fernando Labastida
El novillero mejicano demostró las buenas maneras para interpretar el toreo; con su único astado logró dejar una buena tanda de verónicas de buen gusto rematando con media a la cintura. Con la muleta, le redondeó una gran faena con derechazos templados y naturales bien largos y mandones; con la música como premio a su faena, hacían creer que se cerraría con un buen espadazo; pero no pido colocar la espada en el sitio y se limitó a oír las palmas.
Manolito Vanegas
El novillero tachirense, instrumentó una buena faena a un astado que llegó con mucho gas al último tercio; sin embargo, su faena fue bien planteada y de largo le dio buenos derechazos que el público coreó al son de la música; tampoco la espada le ayudó y pinchó para oir palmas.
Tomás Martínez
El torero local estuvo bien en su ejemplar donde destacó por derechazos aunque carecían de continuidad y ligazón; le dieron la música pero no pudo con la espada y luego de varios intentos despachó oyendo un recado presidencial.
Jesús Enrique Colombo
El más pequeño de la noche; le correspondió torear de último al niño torero tachirense; su astado perteneció a la ganadería de Jerónimo Pimentel el cual fue bravo; pero que llegó con mucho motor al último tercio. A pesar que el joven estuvo centradito y con buen planteamiento de su faena donde el astado le acosaba, el público estaba con él y éste toreó a la altura de las circunstancias; no estuvo certero con la espada y su labor se silenció.
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