Sin trofeos regresó de Nunkiní, Mérida en México este sábado 26 de abril, el matador de toros venezolano José Miguel Parra, tras fallar con el acero al astado de San Martin de Porres al que se enfrentó en accidentado festejo que para más inri no se aparecieron los picadores.
Parra estuvo acorde con el compromiso toreando con lentitud con capa y variedad con la muleta en variadas tandas reconocidas con honores musicales y aprobación de los asistentes, pero la espada le privó de premios auriculares.
De la plaza salió José Miguel Parra con la tarea de entrarle al carretón con la espada todos los días, para que en los próximos compromisos ofrecidos por el empresario, las orejas del triunfo no falten.
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