Es el toro y solo el toro el que da y quita, el que confiere legitimidad al rito taurino. Oleo de Rubén Darío Chacón (+)
*** TEMPORADA VENEZOLANA 2023
La temporada venezolana 2023 ha sido positiva y triunfal; corta en festejos y claramente mejorable en muchos aspectos entre ellos como no podía ser menos: el toro, principal protagonista al que muchas veces sin querer, por la vorágine informativa dejamos de lado.
Pero es necesario detenerse a analizar lo que dejó la temporada en su aspecto fundamental. Es el toro el alma de la fiesta, a él se debe cuidar y proteger, enseñando como vive, su manejo en el campo, porque y para que se lidia en la plaza. Más allá de entrar en las disertaciones propias de un fin de campaña o de analizar el juego dado por cada ganadería es necesario que en nuestras plazas se lidie el toro con trapío, edad y peso, para que todo lo que el torero haga en el ruedo tenga importancia y trascendencia.
Es el toro y solo el toro el que da y quita, el que confiere legitimidad al rito. En festejos mayores esta campaña lidiaron nueve ganaderías, Rancho Grande, El Prado, La Consolación (misma casa), Los Aránguez, Campolargo, San Antonio, Los Ramírez, El Trébol y Villa Franca del matador de toros José Cariel, que debutó con esperanzadores resultados.
Es muy destacable que en Venezuela nazca una nueva ganadería que es fruto del trabajo arduo y lleno de afición de un torero joven que ve claramente que el futuro de la fiesta está en criar y conservar al toro. El gran valor de la ganadería de bravo radica en su riqueza genética, con ella se preserva el ambiente en el que viven vacas, crías y toros beneficiando incluso a otras especies animales sin mencionar lo mucho que aportan económicamente hablando a las ciudades y pueblos donde se lidian en ferias y fiestas populares.
El mérito de los ganaderos venezolanos es grande, por las dificultades lógicas que enfrentan, reconocerlo es justo y necesario porque ellos son el sostén de la tauromaquia nacional. Pero también es urgente volver al toro en condiciones, serio y fuerte con el que el toreo cobra toda su grandeza.
Este año hubo grandes toros lidiados en ferias grandes y plazas menores, lo cual indica que el nivel de bravura es alto. No serán estas líneas un resumen estadístico al uso, pero si es destacable que en 2023 en Venezuela se indultaron seis toros y se le dio la vuelta al ruedo en el arrastre a otros seis, haciendo referencia exclusivamente a hierros nacionales.
El reto para la próxima temporada es mantener alto el listón en cuanto a presentación y juego, esa es una de las mejores maneras de reestructurar el toreo venezolano, desde su base, pues es el toro el fundamento de la fiesta.
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