** Agradecido con el toro siempre será torero
por: Jesús Ramírez "El Tato"
Con una vida plena de enseñanzas y vivencias en el mundo taurino, se desenvuelve el matador tachirense Manolo Fuentes, quien este año 2020 estuvo disfrutando de las corridas de la Feria de San Sebastián en la remozada plaza de Pueblo Nuevo, donde por cierto tomó la alternativa hace 34 años.
Buen conversador, analítico, optimista del futuro de la fiesta que ha vivido con intensidad desde su etapa de novillero en España desde 1982 hasta 1985 donde sumó más de 70 festejos con y sin picadores, hasta lograr la anhelada alternativa en su natal San Cristóbal cortando una oreja el 26 de enero de 1986; sin embargo, al año siguiente no lo contrataron y así se empezaron a alejar las oportunidades en su país.
Ante tal situación, el optimista y joven matador de entonces, no se sintió derrotado, sino que al contrario se marchó a España; allí quien había sido su apoderado de novillero, Gonzalo Sánchez Conde, el popular “Gonzalito”, le hizo algunos festejos y ya en 1988 se hizo banderillero. Su apoderado de siempre lo colocó con el rejoneador Curro Bedoya y con Javier Mayoral, entre otros, aprendiendo a parar los toros, algo tan elemental y necesario en un subalterno.
Para ampliar futuro y ante la seguridad de lo que hacía, se fue a las filas de Antonio Barrera, Mariano Jiménez, Manuel de Jesús "El Cid", Francisco Palazón, Gabriel Picazo, entre otros; y también muchos festivales con el maestro "Antoñete", José Mari Manzanares, Gregorio Sánchez y temporadas completas con los mexicanos Luevano, "Armillita" y "El Zotoluco" con quien estuvo tres temporadas recorriendo la geografía hispana; y por cierto, dando la cara y adquiriendo experiencia con 16 corridas de Miura que estoqueó el diestro azteca.
En su largo trajinar por toda España, sumó corridas sueltas con "Antoñete", Manzanares y Curro Romero, hasta que en el año 2008, toreando con Gabriel Picazo en cartel con Manuel Díaz "El Cordobés" y Javier Conde, en la plaza de Algete, un toro de La Martelilla le infirió una grave cornada que lo mantuvo por cinco meses en recuperación. Allí tomó la decisión de colgar el traje de plata, pasando al retiro tras cumplir 20 años ininterrumpidos de subalterno en España; es el único venezolano en lograrlo y seguro que muy pocos americanos.
Manolo Fuentes llegó a torear hasta 40 festejos por temporada totalizando en 20 años, vistiendo de plata, unos 800 festejos. Hoy en día goza de la jubilación profesional, pero sigue en la ruta del toro, ya que tras su matrimonio en España nació Francisco, hoy un promisor novillero anunciado en los carteles como Francisco de Manuel, nacido en Madrid con sangre tachirense, que abandonó sus dotes como futbolista para dejarse llevar por la pasión taurina heredada y convertirse en convincente novillero con dos años seguidos como triunfador en San Isidro donde salió a hombros relanzado al estrellato.
La nueva promesa del toreo, con sangre tachirense, Francisco de Manuel a la puertas de Madrid este año 2020.
Francisco de Manuel formado en la Escuela Taurina de "El Juli" y la de Basa, en Sevilla, ha escalado extraordinarias posiciones con el apoderamiento del matador en retiro y ganadero Carlos Aragón Cancela, quien por cierto mueve los entresijos del complicado mundo taurino para que el espigado y meritorio diestro abra la temporada novilleril en Las Ventas con una novillada de lujo y tome la alternativa durante la Feria de San Isidro, lo que constituiría todo un acontecimiento y reconocimiento al bonito palmarés de este espigado novillero de clase y valor abismal.
Igual que su hijo, Manolo Fuentes sigue pisando en el mundo taurino con personalidad y la paz que deja haber fraguado el camino con rectitud, honradez y profesionalismo vistiendo 20 años el traje de plata con el brillo del oro. Digno ejemplo profesional de Manolo Fuentes.
Destacó en el Futbol, pero lo arrastró la pasión taurina heredada.
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