por: Giovanni Cegarra
La partida del compañero amigo hermano paisano Erasmo Enrique Kike Rosales Carvajal no se asimila aún, se siente en el alma, infinidad de manifestaciones de pesar ruedan por toda San Cristóbal, Estado Táchira, Venezuela entera, el exterior, todo un homenaje universal para quien supo cultivar la amistad con humildad, sencillez, bien tino.
Sus restos mortales a hombros de sus familiares, allegados, cercanos amigos, aficionados, dieron la vuelta triunfal por el anillo taurino de la Plaza de Toros Monumental de Pueblo Nuevo de San Cristóbal, Estado Táchira, en la que estuvo siempre en plan de aficionado y labor profesional, para salir por la Puerta Grande hacia el Reino Celestial, donde ya descansan en la Santa Gloria del Todopoderoso.
A Mano Kike, le recordaremos, extrañeramos profundamente, en cada nota, narración, transmisión, comentario, crítica taurina, compartir de amigos, juerga, actividad deportiva, en cada rincón taurino y no taurino, de este país, le tendremos siempre presente, eterna honra a este compañero amigo hermano paisano, que hoy por hoy, desde las alturas, estará con nosotros espiritualmente, por siempre y olé.
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