por: Jesús Ramírez El Tato
El Martes 31 de Octubre arribó a 89 años de existencia, un maestro del periodismo taurino venezolano: FEFERICO NUŇEZ SANDOVAL, quien con sapiencia, conocimientos y verbo fácil, supo enaltecer la crónica taurina, en tiempos de un periodismo exigente e importante en todos los diarios; superando además el germen infeccioso del revistero de cuclillas.
Ha sido Federico, junto a Arratia Oses, Antonio Aragón y El Vito, la voz que alentaba el espíritu de los feriantes que se movían a Caracas, Maracay, Valencia, Maracaibo, Mérida o San Cristóbal, con la resonancia de su voz, en un perímetro de audiencia y lectores sin queja alguna y sobrados admiradores.
Quienes estamos sumidos en la vorágine del periodismo taurino, recordamos con respeto a Federico, auténtico decano de la narración taurina a la que consagró tiempo y triunfos sin perder la humildad.
Hoy con 89 años de edad, el hijo de la Valencia venezolana, se pasea por las calles de Atlanta en Estados Unidos, con el calor y apoyo familiar de su esposa Silvia y su hijo Samir, los pilares que con la luz de Dios, lo sostienen y alientan; aunque en su andar no recuerda el maravilloso camino transitado dignamente en el complejo mundo taurino.
Que Dios siga guardando la vida de este personaje sin igual que supo cantar y contar con voz privilegiada, lo bueno y maravilloso de la Fiesta Brava, sin dobleces y respetando siempre la sagrada misión del crítico taurino.
Un gran abrazo a Federico Núñez
Muy bonita y acertada la descripción que haces de mi Papá quien dedicó su vida a enaltecer el espectáculo Taurino a través del micrófono. Como tu bien has dicho su memoria no recuerda los andares de la fiesta brava pero su salud física es buena. Gracias por esta nota de reconocimiento que has publicado y de igual manera te admiro como gran periodista que eres. Un gran abrazo yo soy otro de los hijos de el .
ResponderBorrarQue duro es recorrer un camino y no recordarlo, pero lo es aún más cuando en ese tráfago se sembró, se toreó y se llevó en el alma la fiesta que nos ha arrebatado temporalmente la tragedia venezolana.
ResponderBorrarLa satisfacciòn y el deber cumplido con la fiesta brava ha sido una placa de honor de Federico, quien cumplio su cometido !Felicitaciones!
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