por: Víctor José López EL VITO
Hay rumores que hay rivalidad entre Manolo Vanegas y Jesús Enrique Colombo. Sólo rumores que de ser ciertos sólo ellos, o sus apoderados podrán certificar porque en los ruedos, donde se siembra la historia de una competencia no ha pasado nada.
Con su sabiduría, esa de siempre con sus oportunas expresiones, Juan Silveti un día me comentaba que “lo malo del pleito entre Manolo (Martínez) y Eloy(Cavazos) es que sólo ellos están enterados del pleito”.
Lo contrario a lo que ocurría con Joselito El Gallo y Juan Belmonte. Mientras ellos compartían un café en el tren camino a Sevilla, en la estación de Santa Justa los aficionados encendían pasiones.
Así ocurría en México, cuando Garza y Armillita y, todavía hoy, existe rivalidad entre los aficionados mientras los colosos se respetaban profesionalmente.
Escucho un nocivo rumor que hay obstáculos escondidos para realizar el sueño de un mano a mano entre Manolo con Jesús Enrique.
Trabas similares a aquellas que vivimos los venezolanos, cuando la afición quería ver en el Nuevo Circo o en la Maestranza de Maracay a Luis Sánchez “Diamante Negro” mano a mano con Alí Gómez, Joselito Torres y César Girón, o al propio Girón con El Diamante.
Aquello que debió haber sido y no pudo ser porque se quedó en los despachos de las empresas. Nos preguntamos: ¿Ocurrirá lo mismo ahora con esta pareja que, en este momento, es el único cartel capaz de salvar la Fiesta de los Toros en Venezuela, hundida en las arenas movedizas donde la ha sumergido la política?
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