En puertas la Feria El Vigía y Tovar, estado Mérida, Región Andina Venezolana.
No cabe duda, que el camino que viene recorriendo la Fiesta Brava en Venezuela llegando al medio año del 2023, en medio de la cruda coyuntura socio económica política que se vive y convive en el país, ha venido avanzando a ritmo aceptable, dentro de lo que cabe, luchando por su permanencia e impulso, sin olvidar los solapados oscuros ataques de quienes arropados por “las naguas” de algunos inmersos en la cosa pública, no dejan de fastidiar con sus irrelevantes argumentos, fuera de todo sentido común.
La Fiesta Brava en Venezuela, sigue su rumbo, quiéranlo o no, ha sido y es, factor determinante de impulso económico turístico de una aldea, población, ciudad, Estado, del interior de este ancho territorio nacional, en la que se celebran tradicionales ferias que la incluyen en su programación de actividades socio culturales deportivas religiosas y en lo que va del presente año, vale destacar, se han celebrado 13 corridas de toros, una novillada sin picadores, un festival taurino y uno cómico taurino, una fiesta campera, para un total de 44 orejas cercenadas, 4 rabos cortados, 4 indultos, 3 rabos simbólicos.
Ya se tienen por delante, la presencia taurina en ferias como la de El Vigía a mediados de junio y la de Tovar en septiembre, en el estado Mérida; la de Táriba en agosto en el estado Táchira, escuchando en corrillos de otras que pudieran darse en el centro y el llano venezolano.
Claros estamos que lo taurino en Venezuela, no se la tiene fácil, es gratificante y aplaudible, el esfuerzo y voluntad que ponen de manifiesto, empresarios taurinos que indudablemente requieren también, sin excepción alguna, del apoyo no solo de los aficionados sino también, sin distingo de clase y posición, de las autoridades municipales gubernamentales turísticas, de todos los sectores, que de una u otra forma, se benefician directa e indirectamente de ella. No vale que algunos, por ahí, se den figurón, en la unión está la fuerza, trabajar todos, por la permanencia, fortaleza, presencia, de nuestra Fiesta Brava.
Por supuesto, en este rumbo que sigue la Fiesta Brava Venezolana, imposible olvidar, a nuestras escuelas taurinas que están activas en el país, también luchando contra los ataques que pesan sobre ellas, apoyarlas con todos los hierros, en su labor instructiva formativa de la generación de relevo de la Cantera Taurina, en todo un encomiable esfuerzo que hacen sus Maestros Instructores, lo demás es cuento, “camino se hace al andar” y olé.
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