CUATRO OREJAS EN FINAL DE FERIA DE VALENCIA 2009

Manolo Vanegas con las dos orejas. Foto: G. Castillo Fotos Gladis Castillo Jesús Ramírez “El Tato”(Especial para Venezuela Taurina) Unas dos mil personas con entrada gratis, asistieron a la novillada que colocó el cerrojo a la Feria Agro Industrial de Valencia el domingo. Fue un festejo sin picadores con astados con peso promedio de 237 kilos. El que abrió plaza perteneció al hierro en vía de extinción del “Marqués de la Real Defensa”, bravo, con fijeza sobre todo por pitón derecho. Fue el más claro de la tarde que fue cubierta con reses de “El Rocío” de pocas fuerzas y variado comportamiento y con uno muy manso lidiado en tercer lugar. LEONARDO VEGA tuvo buenos momentos con la muleta en la derecha en varias tandas que obligaron la música. Intento con la izquierda sin que el astado repitiera. Mató al segundo intento y las ovaciones no rompieron el frío del inicio de la tarde por lo que dio vuelta al ruedo. JHONATAN GUILLEN toreó bien a la verónica y con la muleta instrumentó derechazos de buen gusto que ameritaron la música. Tiene clase y buen desempeño. Mató al primer viaje y recibió una oreja. MANOLO MUÑOZ se enfrentó al peor del encierro que le zarandeó varias veces pero sin perder el ánimo. Desigual en banderillas y deseoso con la muleta fue aplaudido al despachar al regalito de fea apariencia. MANOLO VANEGAS con buen porte de torero salió deseoso toda la tarde. Luciendose a la verónica y en largas de rodillas. Muy valiente de hinojos en labor de muleta en repetidas tandas con la diestra. En conjunto buenos detalles y disposición del joven espada andino que evidenció sitio y conocimientos apropiados. Mató de estocada y apresuradamente la autoridad concedió las dos orejas. EDGAR ANTONIO recibió a portagayola a su enemigo. Desigual en banderillas. Su barra de aficionados supo corearle toda la tarde hasta que sonó la música en tandas de derechazos. Estuvo con ganas, insistente y al despachar de pinchazo hondo y media, recibió una oreja que pidieron sus seguidores. RAUL CABRERA creo que era el nombre de quien salió en sexto lugar, con más pinta de pelotero importado que de torero. Verde y sin conocimientos, estuvo allí hasta que pasaportó al animalito sin dejar huella. Presidió la comisión taurina que por cierto no se ubicó en el tradicional palco el secretario Lubin Labrador, que al parecer tenía gripe porque utilizó mucho el albo pañuelo.