Vuelta al ruedo de Jesús Enrique Colombo en Las Ventas aunque sin suerte con la tarde lluviosa y los toros. Foto: las-ventas
**** Andrés Roca Rey actuó dos tardes y cortó una oreja in extremis al toro que cerró la feria de San Isidro
La feria de San Isidro en Madrid es la más importante del mundo y el mejor escenario para los toreros darse a conocer y abrirse paso. En la edición de este año 43 matadores de toros actuaron en el ciclo, por nacionalidades los europeos fueron 37, 35 españoles y 2 franceses. Los toreros americanos 6, 3 mexicanos, 1 venezolano, 1 colombiano y 1 peruano y sólo dos de ellos cortaron una oreja.
De los matadores de este lado del Atlántico, Andrés Roca Rey es máxima figura; los otros espadas aún tienen mucho camino por recorrer. Jesús Enrique Colombo fue el primero en ver acción el 14 de mayo con los toros de Pedraza de Yeltes. Curiosamente los dos astados de su lote se llamaban "Holandero" el primero, número 26 y el segundo, número 66. Colombo tuvo una seria actuación perjudicada por la lluvia que arreció en sus dos faenas, con el presidente contando pañuelos y un público distraído sacando paraguas y chubasqueros que no pidió la oreja con más fuerza. Dio la vuelta al ruedo; el otro toro de su lote se lo puso más difícil.
Ese mismo día el mexicano Isaac Fonseca se enfrentó a uno de los toros más bravos del ciclo: el famoso "Brigadier", premiado con la vuelta al ruedo del que paseó una oreja menor. Mucho valor y entrega pero sin cuajar plenamente al toro lo cual por otra parte era bastante complicado.
Andrés Roca Rey actuó dos tardes, sin suerte el día 23 con los toros de Victoriano del Río, cortó una oreja in extremis de su último toro de la feria "Tomillo" de El Torero la tarde del día 29.
El valor temerario del mexicano Diego San Román destacó el día 25 en su confirmación de alternativa con los toros de Fuente Ymbro. Saludó dos sinceras ovaciones.
Otro diestro que se ganó el respeto por su inmenso valor, fue el colombiano Juan de Castilla en un serio toque de atención. Con su primer toro "Caracorta" de Dolores Aguirre se jugó la vida, sufrió dos cornadas y dio una vuelta al ruedo con mucha fuerza. Regresó de la enfermería para lidiar su segundo dándole nombre propio a la tarde del día 27.
Joselito Adame cerró el sexteto americano con una actuación seria, con oficio sobrado pero fría y sin conectar con el público. Adame llegó en este festejo a su corrida número 600 de por vida, todo un dato.
Sin un triunfo grande en Las Ventas, los toreros americanos deberán esperar mejores oportunidades para mejorar su situación; abrirse paso en los ruedos europeos cada vez es más difícil, lo más probable es que sumen un número de corridas similar o incluso menor que otras temporadas.
Las Ventas y su puerta grande son la llave del toreo, abrir los candados del sistema sólo puede hacerse con ese triunfo tan maravilloso y a la vez tan difícil.
Fotos: Página Plaza de Toros de Las Ventas. Plaza 1
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