La tesis animalista

Manifestación Antitaurina - Barcelona 2007. Foto: animanaturalis

por: Enrique Barrios Barrios

FUNDAMENTO ANTITAURINO.-
Los adversarios de la Fiesta Brava alegan como razón primordial para propiciar la prohibición de las corridas de toros, el supuesto sufrimiento y la decisión de darle muerte en el ruedo al toro de lidia. Pues bien, el afamado etólogo y apasionado animalista José Francisco Zamorano Abramson, en sus respectivas investigaciones de carácter científico, ha sostenido que ciertamente nadie puede afirmar que los animales sienten dolor, aunque tampoco nadie puede negarlo.

En cambio, los estudios realizados por el profesor Juan Carlos Illeras del Portal, Director del Departamento de Fisiología Animal de la Facultad de Veterinaria de la Universidad Complutense de Madrid, concluyen explicando, que los toros durante la faena taurina, liberan las hormonas betaendorfinas que bloquean la sensación del dolor, y por tanto, el animal sufre poco o deja de sufrir durante el espectáculo taurino.

CAMBIO DE VALORES.-
Tal vez, pretendiendo realizar un lavado de conciencia, las instituciones públicas y privadas que actúan en los diferentes países del mundo, ante la imposibilidad de atender al llamado universal del derecho de las personas a una vida digna, pervierten este sagrado objetivo al cambiar los valores del humanismo al animalismo, y en vez de resolver los problemas del sufrimiento de la gente necesitada, se dedican a preocuparse del presunto sufrimiento de los animales, desconociendo, hipócritamente, que el hombre en la historia del planeta, ha venido comiendo y seguirá consumiendo carne, pescado y otras especies zootécnicas, por constituir tales elementos, la base alimentaria de la humanidad.

LA CHINA Y SU TRADICION.-
En el país chino de la actualidad, cualquier animal, incluidos los perros o gatos domésticos, puede ser sacrificado o cocinado, sin que la ley contemple ningún castigo. Recordemos la fuerte campaña desatada hace algún tiempo, por las Sociedades Protectoras de Animales, cuando una epidemia de rabia fue combatida por los gobiernos locales del referido país, con matanzas indiscriminadas de miles de perros.

En China, durante siglos, los perros, los gatos y otros animales domésticos, han constituido factor importante en la alimentación de diversas comunidades; llegándose a calificar la defensa de estos animales, como una influencia occidental que pone en peligro las tradiciones orientales.

Por todo lo expuesto, rechazamos el ataque frontal a las corridas de toros, sobre todo si las conceptuamos como una expresión de la cultura, el arte y la tradición de los pueblos.

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