Alrededor del mediodía del lunes próximo pasado, nuestra apreciada amiga vecina taurina Carmen “Carmencita” Elena Zerpa viuda de Bustamante, abordó el bus celestial para dirigirse al Reino de Dios, donde tendría su reencuentro con su amantísimo esposo, Jorge “Jorgito” Bustamente Calderón, quien ya había partido hacia allí, desde hace cuatro meses y unos días.
Jorgito y Carmencita han tenido su anhelado reencuentro en el Reino de Dios, desde donde habrán de velar por el bienestar de sus hijos y nietos, tras haber vivido, convivido, disfrutado del mundo terrenal, en franca armonía ejemplarizante familiar, de su arraigada afición y pasión, como lo fue la Fiesta Brava, compartir con quienes tuvimos la fortuna de conocerles, saber de su vivencia social católica humana solidaria, de su humilde y sincera amistad.
Allá en el Reino del Creador del mundo, se han reencontrado, tras corta separación terrenal y hoy por hoy, conviven en el hogar celestial, de la mano del Todopoderoso, vigilando y quizás hasta guiando los pasos y acciones, de su familia, de quienes compartimos con ellos, el devenir social vecinal laboral taurino, que no olvidaremos nunca y menos a ellos, su intachable ejemplo hogareño, va por ellos, descansen y gocen, Jorgito y Camencita, del Reino de Dios y olé.
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