Leonardo Benítez en la ganadería de Julián Hamdam

Posan en el tentadero Adrián Olivo, Emmanuel Benítez, Leonardo Benítez, el matador Juan Querencia y su hijo el novillero Rafael, el ganadero Julián Hamdan y el novillero El Luis.

*** "El León de Caracas" ruge en el campo bravo mexicano

por: Jesús Ramírez "El Tato"

Quien tiene retiene, dice un viejo dicho que ratifica el matador Leonardo Benítez "El león de Caracas", que luego de cierto tiempo de meditación y análisis, ha regresado al campo bravo mexicano; concretamente a la ganadería de Don Julián Hamdam, cerca de Tequisquiapan, donde con tres bravas vacas de clase y nobleza, volvió a rugir el león con su estilo personalísimo y denodado valor, entendiendo y aprovechando la calidad y nobleza de las embestidas de las reses lidiadas.

Benítez brindó una de las vacas a su hijo Emmanuel, que ahora acompaña ilusionado a su padre en este extraño paraíso, donde no se sabe aún si recibirá la posta del valor para exhibirla en los ruedos; esos que el maestro caraqueño, no solo ha pisado con profesionalismo y pundonor, sino que ha dejado huellas indelebles de torerismo y valor recordados por la afición.

El diestro caraqueño seguirá en el campo bravo azteca atendiendo invitaciones de ganaderos que le aprecian y valoran junto al matador Alejandro Vertiz; ambos con mucha ilusión y sobrada mística, para la renovación de éxitos pasados y amordazado con libertad creadora, sustentada en la entrega y solidez del toreo fundamental; y si es necesario, -nos dice muy seguro- esforzarse el doble para llegar y defender el sitio conquistado.

De momento, campo y más campo, con profesionalismo y vocación de novillero, que el tiempo y Dios, dictarán las pautas.

Leonardo Benítez brindó una de las vacas a su hijo Emmanuel, de 16 años.