Lima.- Continuando con el trabajo especial, dedicado a Venezuela, para informar del quehace de sus toreros en tierras peruanas, en esta oportunidad conversamos virtualmente con el matador de toros Tovareño Rafael Orellana, quien es hijo de un profesional y mejor amigo como es el matador de toros en retiro: Nerio Ramirez “Tovareño”, quien entre sus tantos triunfos taurinos, indultó un toro de la ganadería mexicana Reyes Huertas, por allá en el año 1980, en la tradicional Plaza de toros de Nuevo Circo, de la ciudad de Caracas.
1. ¿Qué tal el inicio de año 2020? ¿Ya tenías algunos festejos pactados para el resto del año?
RO: Si, empecé muy bien, con pie derecho toreando el 1° de enero junto al matador peruano Kuntur Alfaro en distrito de Atiquipa - Arequipa; luego el 30 de enero en Ayaviri – Puno, donde corté dos orejas; eso me pareció extraordinario. Sin embargo, después todo se cayó por la pandemia, ya que tenía 11 festejos confirmados, y como tú sabes posteriormente van saliendo otros más; esperaba llegar este año a torear 35 o 40 corridas de toros.
2. ¿Dónde te encontrabas cuando decretaron el estado de emergencia en el país?
RO: Estaba acá en Lima, preparándome físicamente y toreando de salón para los compromisos pactados y así llegar de buena forma.
3. ¿Cómo te está afectando la pandemia?
RO: Profesionalmente me afectó mucho, ya que en esta profesión es muy importante el sitio que te dá el torear, y creo que, como a todos los toreros, nos hace falta ponernos frente al toro y tener continuidad.
4. ¿Estás realizando alguna actividad económica paralela para sostenerte durante este tiempo?
RO: Bueno, antes de la pandemia ya tenía un negocio de mototaxis, pero ahora estoy reinventándome en el negocio como todos los que vivimos en este país; estoy montando un negocio avícola.
5. ¿Cómo te preparas física y mentalmente ahora que no se puede salir de casa?
RO: Con el trabajo que realizo llego cansado a casa, eso ya te cambia la rutina; pero de la misma forma sigo preparándome cada noche, haciendo cardio y ejercicios estáticos; igual, esto me fortalece y he aprendido a valorar más mi profesión, agarrarle más amor y cariño porque te ganas el sueldo y la comida. Además de enviar a tu casa de la manera que más te gusta y eso no tiene precio.
Quiero agradecer a este país que lo considero mi segunda patria, ya que me ha dado la oportunidad como torero, y superarme cada día como persona, y sé que esto me ayuda a poder tener la oportunidad y dar el gran salto e ir a España a seguir forjándome como torero profesional cada día con fe en Dios y confianza en mí mismo esto se logrará.
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