por: Jesús Ramírez "El Tato"
Los aficionados prácticos vienen ocupando desde hace varios años, destacado lugar en la temporada venezolana. Con afición y esfuerzo han logrado entrar en las programaciones feriales; y cuando no ha sido así, han organizado sus festivales con seriedad y responsabilidad en varias plazas, entre ellas la "Hermanos Girón" del Club El Placer de Tejerías. En este coso taurino, han dejado ver sus progresos estos valerosos hombres de vocación íntimamente desarrollada, que en estos momentos, por el malévolo intruso de Wuhan, se han visto notablemente afectados en sus propósitos.
Meritorios nombres de traje corto como Arnold Miranda, con incursiones en España, Augusto Rodríguez, Miguel Guía, Luis Acosta, Freddy Flores, Leonardo Vega, Homero Polanco, Miguel Gómez, Wladimir Vegas, Ronald López, Tony De Guglielmo y Giovanni Orlando, entre otros, le dan vigencia la fiesta brava en nuestro país, cuando las corridas y novilladas se hacen imposibles.
Y entre esos hombres de taurina ilusión, rebosante de afición y arte, está Homero Polanco, un joven que hace años se dio a conocer como mozo de espadas, ganándose el aprecio de matadores y el mundo taurino. Ya habíamos visto sus buenas maneras en un festival realizado en la plaza "El Cortijo" del Círculo Militar de Maracay; pero cuando se destapó levantando los más favorables comentarios fue en noviembre del pasado año en la plaza del Club el Placer de Tejerías. Esa tarde lo bordó al torear de lujo, con temple y arte al natural, a una res de Juan Campolargo, al lado de distinguidos aficionados prácticos que le acompañaban en el recordado cartel.
Hoy, Homero Polanco cumple rigurosamente la cuarentena, pero soñando con el festival que se realizaría en marzo en el Club de Tejerías. Nos dice que al principio del confinamiento sintió mucha preocupación personal, familiar y económica. Luego en la segunda fase de concientización, la dedicó para realizar en familia diversas actividades como cocinar, escuchar música, ver videos taurinos, que por cierto nos dice, se han convertido en herramientas, no solo para drenar el posible estrés, sino para estrechar lazos familiares que por la rutina diaria laboral se veían afectados.
Polanco en natural de lujo con desparpajo y temple.
El destacado aficionado práctico afirma que no se encuentra encerrado, sino compartiendo; y que tampoco está confinado, sino dándole a la familia el tiempo que se merece con una nueva dimensión de hogar, que ante la pandemia nos indica que se debe pensar en un mundo de mayor comprensión y unión. Finalmente nos dice que está esperando la ampliación de las medidas sanitarias de protección, para reiniciar los entrenamientos junto a los demás aficionados prácticos en el parque Los Caobos de Caracas, donde se sueña en torero con disciplina y mucha afición.
Wladimir Vegas por una convivencia más justa
Wladimir Vegas con fe y optimismo por una sociedad más justa.
En Maracay, otro buen aficionado práctico, Wladimir Vegas, se ha tomado el confinamiento con el optimismo que pronto la normalidad más efectiva habrá de retornar. Wladimir nos dice que extraña sus entrenamientos de lunes a viernes en la maestranza y las sabrosas charlas taurinas de los viernes con matadores y aficionados. Afirma que ha aprovechado la situación para dedicarse a la cocina hogareña, ya que le sirve de práctica por los estudios de Chef que realiza en la Universidad Bicentenaria de Aragua.
Reflexiona con optimismo esbozando que a esta desagradable situación hay que tomarle la parte positiva por una nueva convivencia más efectiva y real que nos lleve a una sociedad más justa y equitativa, entre tanto. -finaliza Wladimir- esperar con fe y optimismo porque el mundo taurino retome su sendero.
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